Todo de una vez.

El Unimog como generalista en la construcción de carreteras municipales.

350 kilómetros de carretera al año: para asumir esta carga de trabajo se necesita una maquinaria de obra eficiente. Por eso Gebrüder Stolz GmbH & Co. KG, de Hammelburg, apuesta por el apoyo de un auténtico todoterreno: el Unimog U 530. El vehículo municipal asume, entre otras, la importante tarea de una pavimentadora de arcenes y, con su versatilidad, se ha convertido rápidamente en el vehículo favorito de los constructores de carreteras.

Hammelburg, al pie de la cordillera del Rhön, en la Baja Sajonia, es, con sus apenas 11 000 habitantes, una pequeña y apacible población en el distrito de Bad Kissingen. La localidad vinícola más antigua de Franconia es una de las 30 ciudades más antiguas de Alemania. El mayor empleador del lugar es el ejército alemán. No pocos reclutas y soldados regulares y profesionales recuerdan su paso por el área de entrenamiento de tropas con su singular pueblo de entrenamiento, Bonnland.

En Hammelburg, donde la tradición tiene una gran importancia, tiene su sede una empresa fundada en 1875 y que actualmente, en su quinta generación, cuenta con más de 400 empleados. Gebrüder Stolz GmbH & Co. KG ha pasado de ser una pequeña empresa de albañilería a convertirse en un actor de gran importancia en esta extensa región. El movimiento de tierras, la construcción de carreteras, las obras públicas, la ingeniería estructural y civil, la seguridad vial, la restauración de edificios y la participación en plantas de mezcla de asfalto constituyen las principales actividades del grupo empresarial.

Hace falta un poco de orgullo.

Las cuatro cuadrillas de asfalto de Stolz procesan unas 350 000 toneladas de pavimento negro al año. Los hombres construyen aproximadamente 350 kilómetros de carretera al año. Último paso en la construcción de carreteras: el arcén. «Es muy importante que los arcenes sean resistentes», afirma Bernhard Stolz. Pues quien se despista un momento o tiene que esquivar algo no quiere acabar de repente en la cuneta. La función principal de las franjas de grava de 1,50 metros de ancho junto a la calzada es el drenaje rápido del agua. Para ello, el material, que suele proceder de canteras regionales (granulado de 0 a 45), se instala con una inclinación del 6 % en el borde superior y del 12 % en el borde inferior de la calzada.

Lo que otros constructores de carreteras encargan a subcontratistas, el grupo Stolz lo hace directamente. La nueva pavimentadora de arcenes basada en un Unimog U 530, uno de los ocho Unimog del parque móvil, ha sido equipada por la empresa AS Baugeräte: en la parte delantera, la unidad de alimentación para el material roto, y en la parte trasera, la compactadora de placas con cepillos de barrido. De fábrica y absolutamente indispensable: el VarioPilot, es decir, la dirección izquierda/derecha intercambiable. El agua transportada en el depósito sobre la caja abierta sirve para compactar mejor el material.

«El U 530 dispone de una dirección de 4 ruedas que lo hace muy maniobrable. El vehículo puede desplazarse por sí mismo de una obra a otra sobre su propio eje. No es necesario un remolque de plataforma baja. Así pues, el Unimog supera a cualquier otro vehículo», afirma entusiasmado el apoderado y director técnico Bernhard Stolz. Y al final del año, tras pavimentar unos 700 kilómetros de arcenes, los constructores de carreteras entonan su canción: «Ein bisschen Stolz muss sein …» (hace falta un poco de orgullo).

 

«el Unimog supera a cualquier otro vehículo»

Bernhard Stolz, Director técnico, Gebrüder Stolz GmbH & Co. KG

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Proyecto realizado con la Agencia General Unimog:
Ing. Kurt Herold GmbH & Co. KG

 

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