Unimog U 427 con superestructura Kahlbacher.
En el servicio a aeropuertos, el Runway Light De-Icer (RLD) se encarga de la descongelación de luces de pista. Y lo hace con un consumo especialmente bajo. Gracias a su precisa tecnología de pulverización, se minimiza el consumo de líquido descongelante.
Unos sensores controlan la pulverización automáticamente.
La pulverización densa y precisa de líquido descongelante evita que se formen peligrosos anillos de hielo alrededor de las luces de pista, impidiendo por tanto que se produzcan daños en los aviones.
Al mismo tiempo, los usuarios de RLD minimizan el consumo de líquido descongelante gracias a la precisa tecnología de pulverización. Durante la marcha, la barra de sensores de desarrollo propio reconoce las luces de pista y transmite la señal al sistema de pulverización en la zaga del vehículo.
Según la velocidad de marcha, el líquido descongelante se esparce con precisión en la zona de las luces de pista, con un chorro de anchura. Cuando se detectan las luces y al pulverizar, una señal de verificación acústica informa al conductor del Unimog. En caso necesario, se puede activar manualmente un ciclo de pulverización adicional pulsando la tecla de pulverización.
En vídeo: Runway Light De-Icer se encarga de que las luces de pista de los aeropuertos estén libres de hielo.